Violencia roja rojita: Atentaron contra el equipo del programa "A Puerta Cerrada"

Como otra muestra de la impunidad que se vive en Venezuela, nuevamente, un equipo de RCTV internacional fue atacado con el propósito de callar al medio que se hace eco de las múltiples denuncias planteadas por los venezolanos. Con más de tres años bajo la sombra de promesas revolucionarias, los habitantes de caseríos ubicados en quebrada de Cúa, en el estado Miranda, hicieron un llamado, a través de sus consejos comunales, al programa "A puerta cerrada", conducido, interinamente, por nuestra compañera Laura Castellanos, para denunciar la desidia gubernamental de la cual son víctimas.

Con la presencia de madres de familia y otros miembros de la colectividad, dos personas, portando gorras y camisas con símbolos del bando oficial, a bordo de una moto, decidieron rondar para, de alguna manera, intimidar a los denunciantes. Al percatarse de que su presencia no cubría el objetivo, desenfundaron el arma de quienes buscan imponerse a toda costa.

Fueron disparados, en total, diez proyectiles, con la misión de amedrentar, de ocultar las realidades que cada vez son más que evidentes. De imponer su modo de pensar, sin importarles compartir creencias políticas. No hubo distingo entre pro gubernamentales y opositores. Los sujetos atentaron contra su propia gente.

Mucho más tarde, efectivos policiales llegaron a la zona, con una hipótesis que explicaba, supuestamente, el por qué se suscitó tan lamentable incidente.

Opinión que no compartimos, pues realmente la gente de los barrios es esta la que, a diario, se levanta muy temprano a trabajar, que recorren vías sin asfalto, que viven sin sistema de cloacas, sin electricidad. Por cierto, esto era lo que denunciaban, buscando mejoras para su sector. La gente del barrio tiene deseos de vivir dignamente y, a pesar de tan viles acciones, no se callará.

El Observador
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