"La continuación de la autoridad en un mismo individuo frecuentemente ha sido el término de los gobiernos democráticos. Las repetidas elecciones son esenciales en los sistemas populares, porque nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo en un mismo ciudadano el poder. El pueblo se acostumbra a obedecerle y él se acostumbra a mandarlo; de donde se origina la usurpación y la tiranía. Un justo celo es la garantía de la libertad republicana, y nuestros ciudadanos deben temer con sobrada justicia que el mismo magistrado, que los ha mandado mucho tiempo, los mande perpetuamente". Simón Bolívar.
No habían pasado ni 72 horas desde que aseguró a la periodista de CNN Patricia Janiot que él no estaba pensando en la reelección, cuando de repente, movido por la pasión patriótica, por el convencimiento absoluto de que sólo él puede gobernar Venezuela, de que los cuatro gobernadores y unos cuantos alcaldes de oposición iban a acabar con sus sagradas misiones, de que había un designio histórico de inmolación de su persona en aras del pueblo que lo ama, dijo "Ya no me llamo Chávez, soy el pueblo y el pueblo quiere que me quede con él hasta el 2019, hasta 2021, hasta el 2031, hasta que el cuerpo aguante".
Apenas pronunciada su generosa oferta de sacrificio, una empolvada y empelucada rectora del CNE saltó firme a asegurar que ya mismo podían hacer el referendo para remendar la Constitución y dejar al hombre disecándose en la silla de Miraflores. El único Rector sensato, por ello acusado de opositor, le dio un frenazo al asunto diciendo que eso ya había sido votado NO el 2-D. Inmediatamente le salió regaño, insulto y solicitud de renuncia por parte del dueño de todos los poderes, quien ordenó la convocatoria inmediata de sus hordas enfurecidas para defender la reelección a toda costa, acosar a los mandatarios electos, seguirles juicios, abrirles investigaciones, saquear sus despachos para dejarles sólo cascarones. Con Mi Comandante al frente amenazando que íUh, Ah, no se va!, los atropellos y la violencia nuevamente, como en años anteriores, están golpeando sobre fracturas que no permiten curar. Gobernadores y Alcaldes rojitos fueron convocados a un Taller sobre Socialismo, dictado en la sede de la Academia Militar, la antigua Casa de los Sueños Azules que quedó como patio de entrenamiento político de un gobierno que no gobierna a un país, sino que lo ataca y destruye ante la mirada indiferente de unos militares que permiten la violación de su neutralidad y ponen una vez más en evidencia que chequera mata galán. Regañados como carajitos, amenazados los que se atrevieron a faltar a la cita con obligarles a tomar un curso de 7 de la noche a 5 de la mañana, estos mandatarios indignos de sus pueblos, salieron derechito a dar su declaración de sumisión, a jurar en rueda de prensa que ninguno de ellos osa tener aspiraciones presidenciales y que todos son unos ceros a la izquierda, porque como dijo el de Mérida cuyo mecate es más largo que el del teleférico, "no somos nada al lado de Hugo Chávez, él es el que importa, nosotros no".
Para completar la fiesta de los eunucos*, la Asamblea Nacional, bajo la ducha conducción de la ex abogada II de la PTJ, se aprestó a darle entrada con carácter de urgencia reglamentaria a la propuesta de enmienda, que ellos, como todo el país, saben que el pueblo ya votó NO el 2-D. En cadena nacional y para que no quede la menor duda de la estatura moral de estos representantes del amo, aplaudieron la propuesta al grito de "No se va, Uh, Ah". Sólo falta que la magistrado del TSJ diga que nosotros votamos NO a la reforma reeleccionista pero que eso no importa, porque no se le pueden violar al señor sus nobles deseos de servir al país per secula seculorum. Ya casi tenemos la fecha, la dijo otro eunuco: el 15 o el 30 de marzo. La Asamblea le complacerá el capricho y pedira el referendo. El CNE se apresurará a realizarlo. El TSJ negará cualquier recurso en contra. E iremos a votar NO todos los que no somos eunucos, los que no tenemos amo, los que apreciamos la libertad, los que pensamos con cabeza propia, los que creemos en la alternabilidad democrática, en los valores, en el respeto hacia los derechos ciudadanos.
La guerra por Venezuela está declarada: de un lado un régimen aferrado al poder, sin otro objetivo que la perpetuidad, alimentando de limosnas a sus seguidores y permitiendo la más grande corrupción, para pagar apoyos. Del otro, quienes desean regresar el país a la democracia. No hay caretas. O eres demócrata o eres chavista. Una vez más, nos veremos en las urnas.
*Eunuco: hombre castrado.
aquí entre nos
Respuesta a la pregunta de la Fosforito quien se preguntó "¿quién es ese señor para que venga a opinar aquí"?: Mario Vargas Llosa es uno de los más importantes novelistas y ensayistas de Latinoamérica. Alcanzó la fama en la década de 1960 con novelas como La ciudad y los perros, La casa verde y Conversación en la catedral. Aún continúa escribiendo prolíficamente, incluyendo crítica literaria y periodismo. Varias de sus obras como Pantaleón y las visitadoras y La tía Julia y el escribidor han sido adaptadas y llevadas al cine. Fue candidato a la presidencia del Perú en 1990. A lo largo de su carrera, ha recibido innumerables premios, sobre todo dos de los máximos galardones que se conceden en el ámbito de las letras hispánicas: el Premio Rómulo Gallegos (1967) y el Premio Cervantes (1994). Otros premios en su haber son el Premio Nacional de Novela del Perú en 1967, el Premio Príncipe de Asturias de las Letras (España, 1986) y el Premio Planeta. Es miembro de la Academia Peruana de la Lengua y de la Real Academia Española. Es doctor Honoris Causa de las Universidades más prestigiosas del mundo: Yale, Ben Gurión de Israel, Harvard, San Marcos de Lima, Oxford, Europea de Madrid, La Sorbona, Universidad de Alicante y el último de ellos, de la Universidad Simón Bolívar. (Fuente: Wikipedia). Por cierto, es autor de La fiesta del chivo, novela que narra la historia de un dictador y su entorno de aplaudidores. Cuéntame de tu curriculo, Iris, a ver si entendemos cómo te atreves a pedir la expulsión de Vargas Llosa de Venezuela… Otro mensajito, esta vez para el Presidente Chávez, que mandó a investigar quién decide eso de los Carnavales, para que él pueda hacer su referendo el 27 de febrero. Pues bien, como evidentemente no es católico ni tiene conocimientos religiosos, le informamos que los Carnavales son unas fiestas movibles y su fecha la fija el Miércoles de Ceniza, que debe caer exactamente 40 días antes del domingo de Ramos. Según el Calendario Litúrgico, estos 40 días son la Cuaresma, que conmemora los 40 días de Jesús luchando contra el demonio en el desierto. Otra cosa, ciudadano Presidente: quien dijo "Ver para creer" fue el apóstol Santo Tomás, no San Agustín… Hasta el próximo miércoles.
Charito Rojas
Notitarde / ND
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