viernes, 26 de octubre de 2007

Creen que la Asamblea viola la Constitución con los artículos sobrevenidos



Súmate desconfía del CNE y del proceso electoral venidero

La organización Súmate denunció en una nota de prensa que el Consejo Nacional Electoral viola la imparcialidad, la transparencia y la independencia con las normas que regulan la campaña del referendo aprobatorio de la reforma. La organización afirma que el CNE no es neutral y no puede vigilar la campaña electoral, cuando, según afirman, aceptan el proselitismo oficial.
Lea el comunicado completo a continuación:


Súmate denuncia que el Consejo Nacional Electoral viola los principios electorales de imparcialidad, transparencia e independencia, al aprobar unas normas para regular la campaña del Referendo de la Reforma de la Constitución que favorecen al sector oficial. También cuestiona que el Poder Electoral se convierta en censor de los ciudadanos y organizaciones que tienen posiciones diferentes ante la propuesta de la Reforma y que no están insertas en ninguno de los bloques que irán por el Sí y el No.

Esta organización ciudadana también considera que el CNE está jugando posición adelantada al organizar un simulacro de votación para el próximo domingo 28 de octubre, cuando el Tribunal Supremo de Justicia no ha decidido si se votará por separado hasta una tercera de los artículos propuestos o toda la reforma en bloque, en respuesta a varios recursos de interpretación del artículo 344 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV), uno de ellos interpuesto por el propio Rector Vicente Díaz.

Desigualdad en la campaña de la Reforma

Para Súmate, el CNE no es neutral ni podrá ser instancia contralora de la campaña publicitaria, cuando avala y promueve el ventajismo oficial, al incorporar en las normas de publicidad y propaganda la aceptación de la labor proselitista del Presidente de la República y los diputados a la Asamblea Nacional, con el argumento de que son los mayores promotores del Sí. Con esta actitud, el CNE contribuye a la desigualdad e inequidad con los actores que no pertenecen a ninguno de los bloques, lo cual es una evidencia de que actúa como otro promotor del Sí, al igual que el Ejecutivo y la Asamblea Nacional.

Con esta concesión graciosa del CNE, Súmate asegura que las irregularidades y violaciones de las leyes serán mayores a las ocurridas en la pasada campaña electoral de las presidenciales. De acuerdo a Súmate, en los comicios presidenciales hubo una utilización abusiva de los bienes del Estado con publicidad a favor de la candidatura del actual mandatario nacional, con una presencia oficial de 14 a 1 en los medios audiovisuales y 3 a 1 en los medios impresos, en relación con la del candidato opositor.

No hay garantía de un proceso electoral limpio

Otra de las observaciones de Súmate tiene que ver con la plataforma electrónica del voto que se utilizará para la consulta de la propuesta de reforma constitucional, que de ser la misma de los últimos procesos electorales, requiere de un período de seis meses para un proceso de auditoría que pretenda ofrecer las garantías mínimas para la celebración de unas Elecciones Limpias. Para ello señala lo establecido en la propia Ley Orgánica del Sufragio y Participación Política (LOSPP), en sus artículos 38, 55, 118, 152 y 168.

Súmate afirma que 100 días sería el mínimo aceptable para la ejecución de las auditorías a la plataforma tecnológica del voto automatizado en Venezuela. Por ello califica como una burla del CNE que pretenda hacerles creer a los venezolanos que cuentan con una plataforma de voto que garantiza la transparencia electoral y resultados confiables para unas elecciones automatizadas, cuando apenas convocó a los técnicos con el fin de conocer y auditar el sistema, 45 días antes del proceso de consulta de la Reforma.

En cuanto al Registro Electoral, Súmate alerta que es falso que se haya auditado hasta 2006, dado que las revisiones técnicas realizadas evidenciaron la existencia de irregularidades, debilidades e inconsistencias en el manejo y control de su actualización, que ameritaban la apertura de una averiguación administrativa. Además, cuestiona por insuficiente el período de tres días establecido por el CNE para corregir las diferencias entre ese Registro y el de 2007, que culminó el pasado miércoles.

El TSJ sin poner orden

Cuando faltan 37 días para la anunciada consulta de la Reforma, a Súmate le resulta insólito que el TSJ no se haya pronunciado en torno a los recursos interpuestos por algunos ciudadanos y actores políticos sobre la constitucionalidad de la propuesta de Reforma y la forma de hacer la consulta, que según el artículo 344 de la Constitución puede votarse artículo por artículo hasta una tercera parte de la misma. También, considera un irrespeto al estado de derecho que la presidente del máximo tribunal, habiendo participado en la Comisión Presidencial para la Reforma, se reserve la elaboración de la ponencia en respuesta al recurso interpuesto por el rector del CNE, Vicente Díaz, cuando lo que procede es su inhibición.

La Asamblea Nacional viola la Constitución

Como inconstitucional califica Súmate el comportamiento de la Asamblea Nacional al aceptar discutir y aprobar la reforma de 33 artículos propuestos por el Presidente de la República que vulneran los principios fundamentales y la estructura de la Carta Magna, además de eliminar y violar derechos humanos reconocidos en la propia Declaración de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. No conforme con ello, añade cambios a otros 36 artículos, que no fueron discutidos ni aprobados en primera y segunda discusión, como lo establece el artículo 343 de la CRBV. Algunas de estas nuevas modificaciones limitan la participación popular al aumentar los porcentajes de electores necesarios para solicitar y participar en los referendos revocatorios, consultivos y abrogatorios.

Por último, Súmate hace énfasis de que los derechos humanos no son materia de consulta electoral, por lo cual este referéndum no puede tener lugar. Agrega que las diferentes actuaciones y omisiones de poderes del Estado como el Ejecutivo Nacional, la Asamblea Nacional, el TSJ y el CNE, son claros signos de que son partícipes o por lo menos cómplices de estas violaciones a la actual Constitución, y que acentúan la desconfianza de gran parte del país de que tengamos un proceso referendario limpio y transparente.

http://www.cnb.com.ve/index.php?id=18&tx_extNoticiasWebCNB_pi1[showUid]=6560&cHash=94dbbddd64

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