Contra las cuerdas

Octubre 19, 2008

El Gobierno se derrumba a velocidad mayor que los precios petroleros

Los precios petroleros siguen cayendo por temor a una recesión mundial de la cual ya se observan síntomas preocupantes. El WTI bajó el jueves a $70.3 el barril; el Brent del mar del Norte a 67.9, mientras que el crudo OPEP cayó a 63.34 (un 7,6% menos que el día anterior), alarma que hizo al cartel cambiar la reunión de noviembre para el 24 del este mes, a fin de analizar la crisis y seguramente recortar la producción. Sin embargo expertos advierten que con las dificultades mundiales, poco podría hacer un recorte para animar los precios. El informe mensual de la OPEP ya reducía fuertemente sus previsiones sobre el crecimiento de la demanda petrolera para 2008 y 2009, al calcularla en un 0,64% y un 0,87% frente al 1,02% y 1,0% estimado hace apenas un mes.

Se pretende hacernos creer que Venezuela está preparada para afrontar la crisis mundial (Chávez dice tener cerca de $ cien mil millones ahorrados para combatirla) pero las cifras del BCV dicen lo contrario. La recesión mundial cae sobre una Venezuela devastada, a pesar de los $800 mil millones ingresados al fisco en los últimos 10 años. Un reciente informe del Centro de Investigaciones Económicas (Cieca) revela que al cierre del primer semestre de 2008, el precio del barril alcanzó casi el máximo del año ($118,98 ) y sin embargo los indicadores del BCV muestran un déficit fiscal de $1.516 millones (que si se considera el saldo derivado de los ingresos y egresos ordinarios el déficit sería de $7.028 millones, que se reduce a $1.516 gracias a los ingresos extraordinarios del ITF y otras operaciones). Hay déficit también en la balanza de pagos ($924 millones) y un flujo de caja negativo en Pdvsa de $9.074 millones. La Pdvsa de hoy registra una caída de la producción a 2,34 millones de BPD (y no los 3,3 que dice el régimen). Las refinerías están agónicas (en el primer semestre Pdvsa dejó de refinar 80 mil BPD y la de Cardón está paralizada hasta enero de 2009). Este año aumentaron las importaciones de gasolina en un 47%. La corrupción se mide por el affaire del maletín. Los PDV bonos cayeron a menos del 40% de su valor: El desbarajuste de Pdvsa es tal, que ha pedido varios préstamos urgentes con ventas de petróleo a futuro para disponer de flujo de caja. La crisis mundial, el riesgo país de 1.400 puntos (el más alto de la región) y el desprestigio de Pdvsa han originado hechos como la negativa del Royal Bank of Scotland a concederle un préstamo por $4.300 millones pagaderos con petróleo a futuro. Antes de que los coletazos de la crisis cayeran sobre ella, Pdvsa se vio obligada a reducir el financiamiento de crudo a países de Petrocaribe, a los que ahora les baja el crédito de 60% a 50% y la otra mitad deben pagarla en efectivo y en un plazo máximo de 90 días. A Venezuela llegaron las vacas flacas en plena época de las vacas gordas a causa de la corrupción y el dispendio. Arrecian las protestas sociales en todo el país. Reclaman las universidades, maestros, médicos, funcionarios y pensionados los pagos que les corresponden, mientras Chávez regala millones a sus socios políticos externos. Las protestas son masivas contra la pasividad y negligencia oficiales ante el crecimiento exponencial de la criminalidad.

Internacionalmente ya predicen que “la seducción” de Chávez estaría llegando a su fin a causa del agotamiento de su milagrosa petrochequera. Cuando el parlanchín insultó al presidente peruano, Alan García, éste respondía que cualquiera con petróleo caro y abundante era líder en un continente empobrecido. El historiador mexicano Enrique Krauze, declaró a EFE que “el encantamiento mágico” que ejerce Chávez está disminuyendo. El corresponsal de La Vanguardia en América Latina, Joaquín Ibarz (”A Hugo Chávez se le agota la chequera”), escribía este jueves que “la revolución bolivariana está contra las cuerdas por el derrumbe del precio del crudo. El Presidente venezolano estará en dificultades para pagar importaciones y mantener programas sociales”. Tanta es nuestra dependencia del petróleo, que con la cesta venezolana a $70 las importaciones este año representarían el 95% de los ingresos del país y vamos a estar peor. En el último debate entre los candidatos a la presidencia de EEUU, Obama prometió romper la dependencia petrolera de Venezuela en un plazo de 10 años.

Con la advertencia de Maza Zavala de que con el petróleo por debajo de $90 “la economía venezolana no podrá sostenerse” y las demoledoras encuestas (los “desgraciaos” discursos del líder aceleran la caída de sus candidatos “bates quebraos”) no es de extrañar que Chávez quiera silenciar a los medios críticos. Por eso arremete contra Globovisión y envía a sus bandas terroristas a lanzar bombas contra la residencia del valiente Leopoldo Castillo. Tarea inútil porque el Gobierno se derrumba a velocidad mayor que los precios petroleros.

Marta Colomina

El Universal/ND

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