Chávez saldrá antes del 2012
Durante los últimos dos años he dado 50 o más charlas sobre la situación política de Venezuela a grupos de estadodunidenses y a grupos de latinoamericanos en nueve países de nuestra región. Uno de los componentes de estas charla que no he variado es el pronóstico que hago sobre la salida de Chávez del poder antes de las próximas elecciones presidenciales de 2012. Quienes me oyen me preguntan, con frecuencia, como puedo hacer tal pronóstico cuando Chávez parece estar en total control de todas las instituciones del país y tiene los bolsillos repletos de dinero petrolero, con el cuál ha sobornado al ejército y a muchos venezolanos y parásitos políticos del hemisferio. Algunos añaden: si Gómez mandó en Venezuela por 27 años sin tener tanto dinero, no cree usted que Chávez pueda eternizarse en el mando?
Mi respuesta es: ningun caudillo o dictadorzuelo venezolano o, inclusive, latinoamericano, había pretendido, como lo está haciendo Chávez, salir de sus fronteras para convertirse en lo que un agudo compatriota llama un “geopolítico”. Chávez, gracias al dinero petrolero del cuál se ha apropiado indebidamente en cantidades masivas, ha tratado de convertirse en un mesías latinoamericano y hasta en un líder de los bajos fondos políticos del planeta, al celebrar alianzas con las FARC, Hizbollah, Irán, Mugabe, Morales, Kirchner y otras alimañas.
Esa pretensión ha sellado su fracaso. Mi amigo, arriba citado, me añade algunas otras reflexiones que han venido a reforzar lo que era esencialmente intuición de mi parte: “Chávez ha adquirido tantos compromisos en el mundo, ha abierto tantos frentes, se ha extendido tanto, que el bienestar de su pueblo ya no figura en los primeros lugares de sus prioridades y, aún cuando lo quisiera, ya no podría resolver los inmensos problemas sociales y económicos que acogotan al país. Ya no tiene tanto dinero, los recursos humanos que lo acompañan son muy mediocres y la progresiva desorganización que caracteriza al régimen amenaza con hacer implosión”.
Creo que mi amigo está claro. Hugo Chávez no considera como mandato (si es que alguna vez lo consideró así) el bienestar de su pueblo y la búsqueda del progreso nacional, el cuál no puede jamás lograrse dividiendo nuestra sociedad como él lo ha hecho, con su discurso saturado de odio. Su mente está en otra onda, bastante lejos de Churuguara o de San José de Tiznados. Está concentrada en banderillar a USA, usar a Morales y a Ortega como mandaderos, coordinar actividades con las FARC, hacerle la corte a Putin, abrazar a Ahmadinejad, invitar al país al genocida del Sudán ya que irritará mucho a Obama y usar a PDVSA como caja chica, con la servil complicidad de Rafaél Ramírez, para tratar de llevar a cabo sus ridículos proyectos de hegemonía hemisférica, aliándose con violadores, obispos gozones y vaqueros corruptos.
En el sentido correcto que debe acompañar al término, Hugo Chávez no es presidente de Venezuela. Su trabajo de tiempo completo es convertirse en líder de un movimiento global contra el “imperio” estadounidense. El pueblo venezolano ha sido lento para comprender esto, muy lento, adormecido seguramente por el reparto humillante de limosnas a nivel de MERCAL, PDVAL, las misiones y otros instrumentos mediante los cuáles Chávez ha mantenido a millones de pobres venezolanos adormecidos. Pero cuando el dinero comienza a escasear y la gente advierte que el “amor” del dictador no es por su pueblo sino por su propia fofa y grasosa imágen, entonces es cuando el llamado proceso “revolucionrio”se acerca a su final y se huele el fin del sátrapa.
Ello ocurrirá, no mediante un golpe de gorilas, como los que el condujó en 1992, sino mediante una rebelión abierta del pueblo venezolano, apoyado por sectores de la fuerzas armadas hastiados de tanta corrupción y de tanta ineptitud. Chávez tendrá su 23 de Enero, como lo tuvo Pérez Jiménez. La diferencia es que Chávez no podrá huir como lo hizo tranquilamente el pícnico de Michelena. Pérez Jiménez era un dictador eficiente, concentrado en hacer obra física en el país y robar bastante. Como no tuvo delirios de grandeza hemisférica o planetaria, cuando le llegó el momento de huir lo hizo en su avión y vivió feliz por décadas en su palacete de Madrid, con la ayuda de las maletas de dinero que se había robado.
Chávez es otra cosa. Chávez es un dictador inepto, prisionero de su bocota, con tantas promesas insatisfechas hechas a tanta gente en el planeta, que nadie querrá recibir su patética figura en desgracia.
Sin tener donde irse, porque Irán se hará la loca y Cuba estará negociando un tratado comercial con USA, un Chávez desplumado, lloroso, purgará sus crímenes contra la nación en Yare, sin que esta vez Caldera pueda indultarlo. Esto viene antes de 2012. Entonces veremos si Wilmer Ruperti le comprará uno de sus cuadros.
1 comentario:
guao que análisis! Chávez es "un dictador inepto, prisionero de su bocota" jajaja pero que ha mandado 10 años y superado marchas, golpes de estado, paro petroleros, y la no renovación del canal más viejo dentro del país, para ser inepto creo que más ineptos son los que lo han tratado de sacar por la vía legal (elecciones) o por la ilegal (golpe de estado, recordemos cómo salieron huyendo del palacio a después de 2 días y poco más de tomar el poder por un golpe mediático). Conclusión, Chávez es inepto y sus opositores son recontraineptos, y si esta preso de su bocota, creo que tú con tus 50 charlas en el extranjero estas más amarrado que él, pobres de los que te escucharon, a lo menos más de uno cuando te escuchaba se preguntaba ¿si estos ineptos no han sacado a un débil mental del poder durante 10 años de lucha esteril, este boquifloja viene a decirme que saldrá en 3 años así no más? y después de contestar la pregunta obvia se reiría de ti con sus amigos después de la charla, diciendo pobre tercermundista tan iluso como los demás...
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